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La obesidad aumenta el riesgo de padecer 11 tipos de cánceres

La Organización Mundial de la Salud (OMS), la World Cancer Research Fund International (WCRF) y la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC) -por nombrar algunos-, han concluido que la obesidad se relaciona directamente con:

  1. Cáncer colorrectal.
  2. Cáncer de mama (post-menopausia).
  3. De ovarios.
  4. De vesícula biliar.
  5. Cáncer de riñón.
  6. Cáncer de hígado.
  7. De esófago.
  8. Cáncer de páncreas.
  9. Cáncer de próstata.
  10. De estómago.
  11. De útero (endometrio).

¿Por qué preocupa esta relación obesidad – cáncer?

¿Sabías que la obesidad y el cáncer tienen una relación bastante estrecha? Estudios realizados durante los últimos años han determinado que el sobrepeso aumenta el riesgo de padecer hasta 11 tipos de cánceres, incluyendo algunos de los más comunes como el de mama, el de próstata y el de colon.  

La principal preocupación se centra en el aumento de personas con sobrepeso a nivel mundial.

Sólo en Ecuador, la última Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut 2014) determinó que seis de cada 10 ecuatorianos padecen de sobrepeso u obesidad: dos de cada cuatro niños, uno de cada tres adolescentes y tres de cada cuatro adultos.

Y a nivel mundial, la OMS detalla que anualmente mueren mínimo 2,8 millones de personas a causa de esta enfermedad, que no solamente se relaciona con algunos tipos de cánceres sino con otras patologías como la diabetes o la cardiopatía isquémica.

¿Por qué la obesidad puede generar cáncer?

Antes se pensaba que las células de grasa eran simples depósitos que se almacenaban en el organismo y que funcionaban a manera de combustible cuando el cuerpo lo necesitaba. Es decir, en palabras del Instituto Nacional del Cáncer (NIH), eran considerados «depósitos pasivos» de grasa.

Pero los estudios han demostrado que estas células no son pasivas ni mucho menos.

El tejido adiposo posee una alta actividad metabólica, en el que sus células liberan una serie de productos químicos que hacen que otras células cercanas a ellos actúen de manera diferente, cambiando así el ambiente dentro del cuerpo y dando lugar a células potencialmente cancerosas.

De esto último, la WCRF International publicó tres explicaciones que sustentan este proceso:

1. Respuesta inflamatoria

Es el proceso en el que las células del sistema inmunológico rodean a una gran colección de células de grasa para «ordenar» el área alrededor de ellas.

Pero cuando las células inmunes hacen esto, también liberan sustancias químicas conocidas como ‘citoquinas’ que alientan a las células a dividirse más rápidamente de lo que mueren, generando una acumulación de células que pueden conducir al crecimiento del cáncer.

2. Liberación de estrógeno

Las células de grasa liberan grandes cantidades de estrógenos (hormona derivada del colesterol), por lo que a mayor cantidad de células de grasa se tenga, mayor producción de estrógenos habrá.

El problema de esta gran liberación hormonal es que afecta a dos importantes zonas: las mamas y el útero. Las células de estas dos áreas son más sensibles a la acción del estrógeno, que hace que las células de la mama y del útero se dividan de manera incontrolada y por ende, promoviendo la formación de cáncer. 

Esto explica por qué las mujeres que tienen cáncer de mama después de la menopausia, o cáncer de útero, tienen a menudo niveles más altos de estrógeno.

Lee también: ¿Qué es la mamografía?

3. Mayor producción de insulina

La insulina es una hormona producida por el páncreas que actúa como una especie de «llave» para que la glucosa ingrese a las células del cuerpo.

Sin embargo, el exceso de grasa corporal hace que las células se vuelvan resistentes a los efectos de la insulina. Entonces, para compensar, el páncreas secreta más de esta hormona, que finalmente termina acumulándose en la sangre.

Esta acumulación se conoce como ‘hiperinsulinemia’, la misma que durante un largo período afecta los factores de crecimiento de las células. En otras palabras, fomenta la división celular no controlada y promueve el desarrollo del cáncer.